domingo, 9 de marzo de 2008

WEBQUEST: Educación para la Salud Sexual y Afectiva



INTRODUCCIÓN



Algunas definiciones de Educación Sexual



La ES será el conjunto de aprendizajes que permiten el buen desarrollo de las capacidades sexuales, su coordinación con las demás facultades y la consecución de una buena interrelación con las otras personas que resulten estimulantes por su condición sexuada y sexual, consiguiendo altos niveles de espontaneidad y comunicación, y también de respeto y estima.
La ES, tomada en un sentido amplio, comprende todas las acciones, directas e indirectas, deliberadas o no, conscientes o no, ejercidas sobre un individuo (a lo largo de su desarrollo), que le permiten situarse en relación a la sexualidad en general y a su vida sexual en particular.
Consiste en la enseñanza tendente a desarrollar la comprensión de los aspectos físico, mental, emocional, social, económico y psicológico de las relaciones humanas en la medida en que afecten a las relaciones entre hombre y mujer.
La ES es la parte de la educación general que incorpora los conocimientos bio-psico-sociales de la sexualidad, como parte de la formación integral del educando. Su objetivo básico es lograr la identificación e integración sexual del individuo y capacitarlo para que se cree sus propios valores y actitudes que le permitan realizarse y vivir su sexualidad de una manera sana y positiva, consciente y responsable dentro de su cultura, su época y su sociedad.



TAREA

Exposición mediante PowerPoint de diapositivas para conseguir:

1. Valorar y entender la sexualidad como una cosa propia que podemos compartir libremente, que tiene implicaciones sociales y, a su vez que puede estar relacionada con la reproducción.
2. Tomar conciencia del carácter cultural de la sexualidad, y de la diversidad de enfoques que se dan, según las épocas, los lugares, las religiones, las ideologías, etc.
3. Tener un conocimiento de la anatomía y la fisiología de los aparatos genitales femenino y masculino, y relacionarlo con la conducta sexual y sus consecuencias (embarazo, enfermedades, felicidad, placer...).
4. Comprender el hecho de la pubertad: Cambios físicos (caracteres sexuales secundarios) y cambios psicológicos. Captando la diversidad de ritmos de desarrollo para cada persona.
5. Identificar y diferenciar los términos de uso cotidiano referentes a la sexualidad y la reproducción, y saber cuáles son los términos utilizados en el lenguaje divulgativo y científico.
6. Conocer y evaluar moralmente las diferentes posibilidades que la ciencia y la técnica médicas ponen a nuestra disposición a fin de intervenir en la reproducción: Reproducción asistida, contracepción e interrupción del embarazo.
7. Conocer las enfermedades de transmisión sexual más frecuentes (SIDA). Tomando conciencia de la necesidad de evitar las conductas de riesgo.
8. Conocer la legislación vigente relacionada con la sexualidad (interrupción del embarazo...).
9. Darse cuenta de la influencia de los medios de comunicación, la publicidad y el entorno social sobre la conducta sexual de las personas.
10. Promover la autoestima, proporcionando elementos para apreciar y respetar el propio cuerpo y el del otro, y entender y respetar las diferencias de aspecto físico entre las personas.
11. Aprender a valorar otras cualidades en las personas, y no únicamente su aspecto físico.
12. Conseguir expresar, argumentar, fundamentar y defender opiniones, sobre cualquier aspecto referido a la sexualidad y la reproducción con una actitud tolerante hacia las otras personas y sus puntos de vista.


PROCESO

Organizando grupos de 6-8 personas, a cada grupo se les repartirá una ficha en la que se recojan los términos a analizar. Cada grupo se hará cargo de recuperar y recabar información sobre los términos asignados y exponerlo después a los demás grupos. Estos términos incluyen la anatomía masculina y femenina, los diferentes métodos anticonceptivos, las enfermedades de transmisión sexual, las diferentes formas de conducta e identidad sexual.


RECURSOS

Para encontrar información sobre educación para la salud sexual y afectiva:
http://xtec.cat/~imarias/pagwebs.htm
http://xtec.cat/~imarias/biblisex.htm




EVALUACIÓN

En cada uno de los grupos se evaluará la información expuesta, la claridad de los conceptos, el material y los recursos utilizados, la capacidad de comunicación y las dudas y preguntas que sugieran al resto de los grupos.


CONCLUSIÓN

El objetivo de la educación sobre sexualidad es ayudar a los jóvenes a desarrollar el conocimiento, la autonomía y las habilidades –tales como la comunicación, la toma de decisiones y la negociación para hacer la transición a la edad adulta gozando de buena salud sexual. La educación sobre la sexualidad incluye información sobre la anatomía y fisiología, la pubertad, el embarazo y las ITS, incluido el VIH/SIDA. Pero también aborda las relaciones y emociones implicadas en la experiencia sexual. Toca el tema de la sexualidad como una parte natural, íntegra y positiva de la vida. Promueve la igualdad de género, la autoestima y el respeto por los derechos de los demás.

sábado, 8 de marzo de 2008

El sueño de leer el pensamiento se hace un poco más real


Un grupo de investigadores estadounidenses se aventuró en la exploración del funcionamiento del cerebro humano y dio una paso adelante hacia el sueño, o tal vez pesadilla, de leer el pensamiento.

Los científicos en cuestión se dicen capaces de identificar las imagénes que han visto las personas usando las señales emitidas por el cerebro, según las conclusiones de sus estudios publicados este miércoles por la revista británica Nature en su edición en internet.
Para lograrlo, recurrieron a las imágenes logradas por el sistema de resonancia magnética funcional (IRMf), usado para explorar y entender el funcionamiento del cerebro humano. El IRMf permite medir las variaciones de flujo sanguíneo y detectar las zonas del cerebro que entran en actividad a la hora de realizar algunas tareas como por ejemplo hacer un cálculo, tocar algo, sentir ruido o forzar la vista.
Concretamente, el equipo de Jack Gallant de la Universidad de California, en Estados Unidos, se interesó en la corteza visual, la parte del cerebro que reconstituye las imágenes enviadas por los ojos. Dos voluntarios, miembros del equipo, se prestaron al experimento.
"No se trata de leer el pensamiento o los sueños ni de reconstruir la imagen que se ha visto, algo que nadie puede hacer por ahora", advirtieron los expertos.
Antes de pasar a la práctica, el equipo había preparado un modelo matemático a partir de diferencias de presión sanguínea detectadas en tres áreas de la corteza visual.
En total, 1.750 imágenes, como árboles, flores o edificios, fueron presentadas a los voluntarios y su actividad cerebral se grabó mientras las contemplaban.
Posteriormente, el programa calculó, a partir de un nuevo juego de 120 imágenes, qué perfil de señales debería generarse en la corteza visual.
Los dos voluntarios miraron después las 120 imágenes bajo control del IRMf. Finalmente, un ordenador hizo los cálculos entre la actividad cerebral registrada y la imagen observada en ese momento y comparó.
Con un voluntario el éxito fue del 92% y con el otro del 72%.
En un segundo momento, el juego de imágenes pasó de 120 a 1.000 y el porcentaje de éxito bajó en un 10%.
Si el número se elevara a 1.000 millones de imágenes, el programa de ordenador identificaría una imagen en el 20% de los casos, según Gallant.
La introducción artificial de imágenes o de películas en el cerebro humano es todavía ciencia ficción. Sin embargo y según los investigadores, esta técnica desarrollada por el equipo podría servir de ayuda a la hora de diagnosticar ataques cerebrales o demencias, evaluar los efectos terapéuticos de un medicamento o construir, en el futuro, programas que vinculen el cerebro a una máquina y permitan por ejemplo a un tetrapléjico dirigir un instrumento como un brazo artificial.
"La tecnología actual para descifrar la actividad cerebral es relativamente primitiva", admite el investigador, que considera sin embargo "posible" que cree "serios problemas éticos y de respeto a la vida privada dentro de 30 ó 50 años".

viernes, 7 de marzo de 2008

La felicidad no se puede comprar pero sí heredar


El trabajo, realizado en casi 1.000 pares de mellizos y gemelos, reveló que los genes controlan la mitad de los rasgos de personalidad que hacen feliz a una persona, mientras que los factores ligados a las relaciones, la salud y la profesión son responsables del resto del bienestar personal.
"Hallamos que casi la mitad de las diferencias en la felicidad son genéticas", dijo el jueves Tim Bates, investigador de la University of Edinburgh, quien dirigió el estudio. "Realmente es bastante sorprendente", agregó.
Los investigadores realizaron a los voluntarios, que tenían entre 25 y 75 años, una serie de preguntas sobre su personalidad, cuánto solían preocuparse y lo satisfechos que estaban con sus vidas.
Dado que los gemelos comparten los mismos genes y los mellizos no, los expertos pudieron identificar genes comunes que se encuentran en los rasgos de personalidad y predisponen a las personas a la felicidad.
Las personas sociables, activas, estables, muy trabajadoras y concienzudas solían ser más felices, informaron los investigadores en la revista Psychological Science.
"Lo que demostró este estudio es que los gemelos de una familia tenían personalidades y formas de bienestar muy similares y que los mellizos, en cambio, presentaban sólo la mitad de esas similitudes", afirmó Bates.
"Eso implica fuertemente a lo genes", agregó el especialista.
Estos resultados son una pieza importante en el rompecabezas de las investigaciones que intentan mejorar la comprensión de la depresión y de aquello que hace a las distintas personas felices o infelices, expresó Bates.
Las personas que heredan rasgos de personalidad positivos tendrían, además, una reserva de felicidad para lidiar con los momentos estresantes, añadió el autor.
"Una consecuencia importante es que los rasgos de personalidad de extroversión, calma y confianza brindan una fuente, que llamamos 'reserva afectiva', que conducen a la felicidad futura", concluyó Bates.

miércoles, 27 de febrero de 2008

Científicos británicos creen haber localizado la zona cerebral que rige el instinto paternal


Los científicos creen que han localizado la parte del cerebro en la que se forma el instinto paternal de cuidar y alimentar a un niño, según un estudio publicado hoy.

El descubrimiento ayuda a responder a la pregunta evolutiva sobre por qué la gente mira a los bebés de una forma especial, y podría ayudar a los médicos a identificar mejor a los enfermos potenciales de depresión posparto, según indicó en la revista 'PLoS One' un equipo de científicos de la Universidad de Oxford.
"Esto es importante porque tiene que haber una razón por la que cuidamos de nuestros hijos en general para asegurarnos de que nuestra especie sobrevive --indicó Morten Kringelbach, un neurólogo que codirigió el estudio--. Esta es una idea que se remonta a Darwin".
Kringelbach y su colega Alan Stein mostraron cómo una zona del cerebro llamada el córtex orbitofrontal medio se ilumina ante el rostro de los niños, pero no de los adultos.
Los científicos creen que esta zona, situada justo encima de los ojos y conectada a la importante región con la que reconocemos las caras, es clave para controlar las emociones, según explicó Kringelbach.
Para alcanzar esa conclusión, utilizaron escáneres para medir la actividad cerebral en voluntarios a los que se les pedía pulsar un botón cuando una cruz en una pantalla situada frente a ellos cambiara de color. Entre tanto, se les presentaban en la pantalla los rostros de niños y adultos desconocidos.
No había reacción ante las caras adultas, pero las imágenes de niños provocaron un alto nivel de actividad en el cerebro en un segundo, una señal instintiva que podría decirnos que los bebés son especiales, según los investigadores. La respuesta parental era similar entre hombres y mujeres voluntarios en el estudio que no tenían hijos, demostrando que la reacción es innata, añadió.
Según Kringelbach, los hallazgos podrían ayudar a los médicos a identificar al 15 por ciento de las mujeres y el tres por ciento de los hombres del mundo desarrollado que sufren depresión posparto, una enfermedad que puede hacer que los nuevos padres ignoren a sus bebés.

sábado, 23 de febrero de 2008